sábado, 28 de mayo de 2016

LA IMPORTANCIA DEL CERTIFICADO DE SHAHADA

Obtener un certificado que atestigua que una persona se convirtió al Islam no es, de ningún modo, una obligación y tampoco no es una etapa que válida o inválida una reconversión al Islam. Sin embargo, su adquisición es primordial para poder realizar la peregrinación ya que las ciudades sagradas del Islam La Meca (Makkah) y Medina (Madînah) son prohibidas de entrada para los no-musulmanes, tales como fue enseñado por el Corán y la Sunnah del Mensajero de Allâh (que la Paz y las Bendiciones de Allâh estén con él).

Allâh (exaltado sea)
dijo: « ¡Vosotros que creéis! Es cierto que los asociadores son impuros; que no se acerquen a la Mezquita Inviolable » [Sûrah 9 – Âyah 28].

Y el Imâm Mâlik Ibn Anas (que Allâh le haga misericordia) relató en su Muwattâ° según Sayyidunâ Abû Hurayrah (que Allâh esté complacido con él) que el Profeta (que la Paz y las Bendiciones de Allâh estén con él) dijo, en el sentido : « El espacio situado entre las dos extremidades de Medina es sagrado. »

Y Al Imâm Jalâl Ud Dîn As Suyûtî (que Allâh le haga misericordia) dijo : « Los politeístas son impuros debido a la mancilla que es su fe interior. » [Tafsîr Ul Jalâlayn]. Y según el Imâm 'Umar Ibn 'Abd Il 'Azîz y el Imâm Mâlik Ibn Anas (que Allâh les haga misericordia), por analogía, este versículo se aplica a toda persona que no es de fe islámica, incluso los judíos y los cristianos. En cuanto a los ateos, su caso es lógicamente similar.

Esta es la razón por la cual será importante obtener un certificado de reconversión al Islam tarde o temprano, para poder realizar la peregrinación. Pero como fue dicho precedentemente, este certificado no es de ningún modo una condición de validación o de invalidación de una reconversión al Islam.

Al Muwahhidûn.

martes, 17 de mayo de 2016

CUANTO RESPETAS

CUANTO RESPETAS..?

Ni el mundo ni los Cielos pueden contener a tu Señor, el Todopoderoso, sólo tu corazón, sólo los corazones de los creyentes lo contienen. Esto significa que no hay límite en tu corazón.
¿Cuanto sabes acerca de ti mismo? ¿Cuanto acerca de todos los demás?.
¿Cuando estás complacido contigo mismo, al mismo tiempo vas a estar complacido con todos los demás?. ¿Cuando tu verdadera personalidad aparece, cuidarás de respetarte a ti mismo?.
Se nos ha ordenado respetarnos a nosotros mismos porque hemos sido honrados con honores divinos.
Por tanto, ¿puedes respetarte a ti mismo?.. Decimos: ‘Atestiguamos que no hay más dios que Dios y que Muhammad es el Siervo y Mensajero de Dios’ " (ash-shadu an la ilaha ill-Allah wa ash-shadu anna Muhammadan 'abduhu wa rasuluhu).

Entonces, cuando alguien se respeta a sí mismo, va a respetar a todos los demás. Eso hace que nuestro Señor esté complacido con nosotros. Si guardas respeto (a los demás), todos deben también guardarte respeto. Y si todos te respetan, vas a respetarlos también. Entonces todos los problemas encontrarán solución entre la gente. Todos estarán en sí mismos satisfechos.

Por tanto, el que ha recibido sabiduría mira a la gente y los respeta y siente pena por ellos, porque necesitan purificación. Siente respeto y compasión hacia todos, en particular hacia los pecadores. En consecuencia, la sabiduría se preocupa más respecto a todos y quiere poner a todos bajo Océanos de Misericordia.  El castigo divino es también una misericordia para los pecadores, para limpiarlos y purificarlos. Por tanto, el Islam, la fe verdadera, mira a todas las personas y las mira como criaturas honorables y respetables y como dignos  candidatos a ser viceregentes (Jalifas) de Dios el Todopoderoso. Si son limpios, seres humanos puros, entonces Dios el Todopoderoso los corona con coronas divinas, y nadie más que los hijos de Adán han recibido ese honor.

Debes respetarte a ti mismo y respetar a todos. No digas: "Ése es un pecador, ése es incrédulo, ése es cristiano, éste no es musulmán, aquél otro es un judío, y el de más allá es un budista, etc. " Sus acciones pueden ser de toda clase pero han sido honrados y su Señor quiere purificarlos. Allah SWT el Todopoderoso jamás deja a sus siervos permanentemente en las manos del Shaytan (el maligno).

Assalamo aleikum wa rahmatullah wa barakatu.

lunes, 16 de mayo de 2016

BUSCANDO UN SHAYKH I

BUSCANDO UN SHAYKH.  I

SIGNIFICADO DE BAYAT.
Para seguir a un maestro espiritual en el Islam (o Shaykh), es decir, para formar parte del grupo de sus estudiantes (ingresar en una tariqa o la Vía del tasawwuf), uno da 'bayat’ al shaykh.

El Bayat es un pacto de lealtad, es una sunna o costumbre que nos viene recogida positivamente desde la época del Profeta del Islam, sallallahu alayhi wa sallam, y está reconocida además en el propio sagrado Corán.

En el año 4 después de la Hejira, es decir, después de que él migrara a Medina, el Mensajero (que la bendición y la paz de Dios sean con él - saws) fue con un grupo de Compañeros de Medina con dirección a la Meca para hacer el Hajj o la Peregrinación a la Meca, y los mecanos, en ese momento enemigos de los musulmanes, los detuvieron. Hubo varias negociaciones en Hudaybiyyah, parecía que los mecanos podrían declarar una guerra contra los musulmanes allí mismo, y el Profeta (s.a.w.s) recibió bajo un árbol el juramento de lealtad y seguimiento de sus Compañeros que estaban con él.  Juraron que le seguirían y le serían leales contra todo obstáculo y en toda circunstancia. El valor del bayat, de ese pacto de reconocimiento como líder, fue tal que Allah el Altísimo hizo descender un versículo del Sagrado Corán al respecto:

"Realmente Allah quedó complacido con los creyentes cuando te juraron fidelidad bajo el árbol y supo lo que había en sus corazones e hizo descender sobre ellos el sosiego y los recompensó con una victoria cercana". (Sagrado Corán, Sura 48, ayat 18).

A la muerte del Profeta (s.a.w.s), cuando Abu Bakr as-Siddiq recibió la investidura como Califa, recibió también el bayat o pacto de lealtad de los musulmanes. Y desde ese entonces en adelante, cuando un Califa o Sultán ha recibido su investidura, ha tomado bayat de las gentes.

Allah dice en el Corán:

"Oh Vosotros que creéis, obedeced a Allah, al Mensajero y a aquellos de autoridad entre vosotros". (Corán, Sura de las Mujeres, 4, ayat 59)

Por tanto, en el caso del tasawwuf, en el camino de la espiritualidad islámica, cuando se da bayat a un Shaykh, cuando uno, reconociendo que necesita un guía en el camino hacia Allah SWT, libremente se compromete a ser leal seguidor de un Maestro espiritual, es decir, seguidor de un wali o amigo íntimo de Allah, eso se hace en cumplimiento del versículo mencionado: "obeceded ... a aquellos de autoridad entre vosotros".

La autoridad de los grandes awliya (los amigos de Allah, los santos-gnósticos del Islam), han recibido primacía en el campo de la autoridad espiritual. Estas últimas personas, los awliya, también son llamadas los sadiqun (los veraces) o los salihin (los rectos), siendo estos tres términos, consagrados en el Sagrado Corán.

Por eso, cuando uno ha buscado seguir una vía de espiritualidad, se ha dado bayat, a un shaykh de una tariqa o Vía sufi.

En tasawwuf, en el sufismo, eso significa que uno confía en el maestro al que se ha acercado y que desea aprender de él, que pide ser aceptado humildemente como discípulo, que pone sus asuntos espirituales en las manos de un guía experto en asuntos espirituales y que recibe, asimismo, la bendición del shaykh para poder avanzar en el camino hacia Allah SWT  de manera ordenada y sincera.

La diferencia entre quien da bayat y quien sigue sólo 'por lecturas literarias', o 'de lejos' a un shaykh, es la diferencia entre uno que tiene un compromiso sincero y reconocimiento con el shaykh y pasa a ser parte de la comunidad del shaykh y uno que sigue intentando aprender, en último término, sólo por sí mismo, y, por tanto, a merced de su propio ego.

Cuando uno da bayat a un maestro, se empieza a crear un lazo entre uno y otro, y uno puede acudir más íntimamente a exponerle problemas internos al shaykh para escuchar su consejo (nasiha). Y después de todo, como dice un conocido dicho (hadiz) del Profeta (s.a.w.s): Din an-nasiha, la Religión (el Islam) ES consejo. Por tanto, es buscar consejo y saber recibirlo, es ponerse en actitud de recibir consejo de quien tiene autoridad espiritual para ello.

Los consejos que curan los corazones son los consejos y guías de un siervo de Allah sincero que ha seguido el camino de la purificación del corazón a través del dhikr o Recuerdo entusiasta de Allah SWT.

Hoy en día, en esta era de individualismo, de prejuicios materialistas contra lo espiritual, en la que se cree que no puede haber nadie superior a nosotros y en la que la sabiduría se confunde con la mera posesión de montañas de información, muchos musulmanes han abandonado la tradición de seguir a un Maestro, abandonando el Camino de los Compañeros del Profeta (PyB) y, por eso mismo, muchos han empezado a interpretar y seguir el Islam 'según sus propios criterios', es decir, en el fondo, según los deseos de sus egos.

Todos los fenómenos recientes de mal interpretación del Islam se originan sutilmente en esto: todos creen tener derecho a decir qué es el Islam, y todos los que actúan así han abandonado el seguir a un Maestro espiritual, que es aquel que recibe autoridad en el dominio espiritual para comprender en cada época la mejor forma de seguir el Islam en nuestras vidas.

Afortunadamente, el virus del individualismo egoísta no está aún muy extendido, y existen aún maestros a los que uno puede seguir humildemente y con profundo respeto y amor, pues ellos son los testimonios vivos, en cada época, de la inmensa amplitud y perfección del Camino del Mensajero de Allah SWT, Sayyidina Muhammad (s.a.w.s): los testimonios vivos de sus pasos.

BUSCANDO UN SHAYKH II

BUSCANDO UN SHAYKH. II

EL SHAYKH.
Tener un shaykh no es complacer al ego diciéndose: ahora sí que soy un gnóstico verdadero, ¡tengo un shaykh!

Tener un shaykh no es tener una guía de consulta para leer libros ni una plataforma para aprender sobre más libros y diplomas de conocimiento erudito.  ¡Con un shaykh, podré leer libros rectos y fiables, de 'ulamas nobles de Ahlus Sunnah, y descrifrarlos, antes no sabía ni podía, qué bueno es tener un shaykh!  Entiérrate en diplomas de ciencias islámicas si quieres, un shaykh pertenece enteramente a otro campo, al de tu espíritu, no al de tu cerebro.

Tener un shaykh no es convertirse en promotor de traducciones de literatura islámica, revistas de publicaciones o magazines de e-books y e-dawa.

Tener un shaykh no es pegarse a una línea respetable y consagrada de un shaykh anterior, (ya fallecido hace un buen tiempo,) y estancarse en el shaykh anterior.  Para eso tienes a un wakil, o a un muqaddem, pero si hay un shaykh, ése ahora tiene la autoridad, la misma o mayor quizá que la que reposa en los maestros anteriores de la silsila, ¡éste es ahora el shaykh!

Tener un shaykh no es la oportunidad de que vayas a sentirte 'espiritual' ipso facto por  un retiro en el campo, o en la playa, o en las montañas, flotando melifluamente en sonrisas y nubes de color rosa.  ¡Cambia!

Tener un shaykh no es que vayas a escuchar una y otra vez como un reproductor para ti las palabras de alto conocimiento espiritual sufi, secretos arcanos de elevado calibre, cosas de ésas que te gustan tanto, no es que te inundes de frases y 'sohbtes' sobre maqamats, karamats, awliya, silsilas, historia oculta, los Qutbs, fana y baqa, Khidr, la montaña Qaf, grandes shaykh, historias del No Visto y demás información 'sufi'.  ¿Quieres eso? ..

Claro que sí. 
Qué duda cabe. 
Pero quien te complace sin hacerte ver tu negra condición, inflando tu pasión y sin despertarte de tu necedad y rebeldía, ése, ese.. No es tu amigo..no es tu shaykh.

Tener un shaykh no es para que  vayas a bailar danzas muy místicas, o que cantes y recites poemas, o que aprendas lindos cuentos.

Tener un shaykh no es tener a alguien que te hable siempre con voz dulce y angelical, gesticulando con manos largas y finas, cuidando sus pausas y el tono de su voz, incapaz de decirte nada que tus delicados oídos no quieran escuchar.  ¡Un shaykh no es un actor, ni una caricatura, ni un títere, ni un antisistema!  Sabe que un shaykh, (un shaykh vivo) así como tiene Jamal, (Belleza,)  tiene también Jalal, (Majestad,) y así como Ama por Allah, tiene que tener también (tarbiyah) la instrucción para darte y la formación para cuidarte cuando eres rebelde a Allah.

Tener un shaykh no es tener a tu milagrero particular, o un amuleto, o alquien que te haga milagros y prodigios.

Tener a un shaykh no es dormirte diciendo: Mi shaykh intercederá por mi en el Día del Juicio.  ¡Necedad!  Dale buenas razones a él para pedir por Ti en ese Día o él puede ser el primero en denunciarte si has hecho caso omiso.

Tener a un shaykh ¡a ver si te enteras! no es tener ingreso en  la universidad islámica de un 'alim.

¿Desde cuándo el conocimiento de los libros es el conocimiento del corazón?  ¿Desde cuándo es requisito para el ikhlas, o el Paraíso, aprender a dominar el árabe?  ¿Es el tasawwuf un asunto de erudición, o de clases pudientes que pueden pagarse estudios clásicos en el extranjero?.
DESPERTAD.

Aziz el Urmak.