martes, 15 de marzo de 2022

LAS REVELACIONES OBJETIVAS. (Sharif Sidi Muhammad al-Ghalli, QS).

LAS REVELACIONES OBJETIVAS. 
(Sharif Sidi Muhammad al-Ghalli, QS).

Dentro de éste camino, ustedes pueden  asistir y reconocer a los Servidores a través de sus patrones de vida. Si pueden comprender las razones de sus experiencias, esfuerzos y percepciones inusuales del pasado, podrán ver la sabiduría del comenzar la búsqueda de algo más. Los Servidores de hoy son testigos del creciente sentido que existe en algo muy loable de ser descubierto por ellos y por quienes siguen su impulso interno hacia el Misterio más grande de la vida, que encontrarán ciertamente, con la fianza de que no están solos con sus presentimientos. Debido a que el acto de buscar la Verdad automáticamente agudiza el sentido y clarifica su visión, los Servidores probablemente empezarán a reconocer la búsqueda más importante y absoluta, necesaria por la comprensión; una peregrinación espléndida que ya han comenzado un gran número de Servidores y otros que se están preparando para ello.

Cuando esa decisión, es acompañada por la perseverancia, el Servidor avanza espiritualmente y ha sido yá registrado para recibir asistencia, no solamente por su alma, sinó también por los Agentes divinos que están cerca y/a quienes están siempre buscando para ayudar. La Sincronización empezará a manifestarse una vez que los Servidores comiencen el proceso de búsqueda formal, y vendrán a reconocer que están inequívocamente guiados y protegidos en su senda. Esto está asegurado, porque la sed sincera por el Conocimiento y la realización espiritual, se habrá iniciado con una invocación poderosa y confiable sobre lo elevado y que, por ley, no pueden ser ignorados por aquéllos que vigilan y esperan.

Sin embargo, si los Servidores realmente anhelan vivir en armonía con la ley divina, y si desean alcanzar las alturas mayores en lo espiritual, entonces deberán entender claramente que su búsqueda no puede realizarse por motivos curiosos propios. Para conocer el cumplimiento espiritual real, el ego propio debe de olvidarse, pues es en ese auto-olvido donde se experimenta la liberación: la liberación del ego separativo, que es la fuente de todo dolor y pena. Ahora, si el "yo" ha sido olvidado del todo, entonces uno no podrá estar pensando en cuándo o cómo, aquel "yo" deberá liberarse, o qué tipo de felicidad tendrá o en qué tipo de maestro se volverá. Efectivamente, la felicidad completa y verdadera debe incluir la felicidad de aquéllos que están alrededor de nosotros, y ultimadamente también, la de toda y cada cosa viviente con la cual estamos inseparablemente conectados. Es una certeza inmutable que, aunque indudablemente hay una libertad en las apretadas leyes del "yo" inferior, no hay libertad de la Ley divina por la interacción constante entre persona y persona, alma y alma, vida y vida. La alegría más grande por encontrarse en las relaciones con otros es la de ayudarlos; una felicidad real y espiritual - o alegría - puede encontrarse sólo para ser de utilidad, en todos los caminos diversos de la vida, y eventualmente, convergen sobre la única Senda del Servicio. Las razones de esto se expresan en las siguientes aclaraciones.

Un viejo sabio advirtió: ¿Cuándo la persona busca a Allah sin obligación?.¿Cuando se considerarán las múltiples técnicas de la disciplina espiritual?.. aquellas que han sido prescritas y practicadas a lo largo de la historia. 
La declaración anterior puede parecer bastante incompleta. Sin embargo, una investigación más profunda, y con más información, será capaz de elevar el pensamiento y que todo dé un giro más elevado en la espiral del avance que le revelará (que su veracidad) sólo se aplicará con el compromiso del esfuerzo y (hasta cierto punto) también es un logro espiritual.

Esto ha sido afirmado repetidamente por todas las enseñanzas de las grandes luminarias espirituales a lo largo de la historia de la humanidad, y que la individualidad, es realmente una con el conjunto; esto ha sido claramente señalado sobre la creencia en la ilusión de un "yo" aislado y en una indulgencia consecuente de eso, que es la causa de toda separación y, por tanto, del sufrimiento. Además, si nos paramos a reflexionar sobre el hecho obvio de que una porción infinitamente más grande existe, aparte del pequeño "yo", entonces probablemente apreciaremos la insignificancia relativa de aquel y valoraremos la sustancia, magnitud e importancia enormemente mayor de todo lo que no es del "yo" personal. Teniendo ésto en cuenta, de que el individuo está aparentemente separado, podrá reconocer la sabiduría y nunca tendrá ningún interés en ser lo opuesto a las leyes universales de la Creación. Por supuesto, el individualismo del egoísmo es diametralmente opuesto a una ley como tal: la sagrada Ley del Amor, y así, justamente como la sombra de uno, los problemas necesariamente sucederán al transgresor de ésta ley. Aún, en la simple verdad por ayudar a otros, yace nuestro bien más grande, y los aspirantes estarán realmente progresando cuando asisten al progreso de otros. Tal es el camino del Amor de aquel principio glorioso, bajo el cual, la creación de todo y cada uno de los innumerables mundos a lo largo del Infinito, se hace posible en la medida en que la fuerza divina del Amor mismo (de forma silenciosa) penetra en todos ellos. La quintaesencia del universo, entonces, es el Amor, y es el Amor, (por tanto), lo que debe ser personalizado y expresado por cada vida individual en alguna etapa y durante el curso de su crecimiento, antes de ser conducido a la Senda Real del Retorno que todos tienen que atravesar. 

Ahora, el Amor tiene una relación inseparable con la Verdad, pues la Verdad vista se vuelve Amor expresado. El corazón espiritual nunca se puede satisfacer hasta que las experiencias del Amor y la Verdad sean compartidas perpetuamente con otras manifestaciones del Uno, y que pueda reconocerse, por tanto, el camino del servicio amoroso, que es la Senda Real de la Santidad, para el cual, todas las demás disciplinas espirituales están apenas entre las fases preparatorias. Esto puede verificarse fácilmente reconociendo debidamente el hecho recurrente e histórico de que todos los grandes maestros espirituales y verdaderos maestros del Camino han caminado por la senda más noble del servicio desinteresado. Para tales seres iluminados, no podría ser de otra manera y, a su debido tiempo, será similarmente así para toda la humanidad, en la medida en que cada persona reconozca la Verdad (y así) elijan caminar por ese mismo Sendero con el que han sido agraciados los pies de aquellos que se presentaron ante ellos para reclamar su propia libertad espiritual.

A medida que el Corazón de la Existencia progresivamente se desvela, a través de cada alma, de acuerdo con el decreto divino universal e irresistible de la evolución espiritual; a medida que la humanidad necesariamente asciende a mayores alturas en virtud y santidad; y en la medida en que la conciencia es inevitablemente más elevada y santificada a lo largo de las etapas de aprendizaje en que cada personalidad deberá necesariamente volverse más purificada, en la medida en que una mayor comprensión de la esencia sagrada de la vida sea otorgada. Esta esencia más profunda- o Espíritu - es la verdadera naturaleza de todo lo visto, percibido y que tiene propiedades por descubrir, y su más sublime expresión es el Amor, el cual, siempre busca expresarse con el servicio.

Eternamente, el Amor busca fluir para tocar otras partes de sí mismo.. y el Camino del Amor, debe de ser encontrado por cada persona, y es sólo sobre ésta senda del corazón donde se vuelve tan lleno y desbordante con el néctar del Amor divino, que simplemente, no puede ser contenido por otras cosas salvo por el corazón del ser humano y siempre hay más que suficiente para compartir alegremente con todos los demás. El Amor es una impresión, y su encantadora melodía, está siempre esperando para brotar desde cualquier corazón abierto sobre la senda del servicio desinteresado; incluso, una gota diminuta del Amor puro, siempre impresionará en el interior del Corazón cuando comenzamos a penetrar en la Realidad del Único.

Buscar progresar en la causa de la comprensión, haciendo el bien a través de la cautela, y enseñando con el ejemplo. 

Assalamo aleikum.