martes, 7 de junio de 2022

¿CÓMO DESPERTAMOS?


¿CÓMO DESPERTAMOS?

En la medida en que nos creemos que -somos lo que aparece - nuestro cuerpo físico, nuestra altura, nuestra edad, el género, la condición, etc. en la medida en que creemos que somos lo que aparece,  estamos cometiendo un error, y no damos en la diana, estamos equivocados; entonces nuestra vida tiene que ser necesariamente insatisfactoria. En la medida en que vamos comprendiendo, despertamos a Lo que Es, a lo Real; y en esa medida, aparece en nosotros la serenidad, la paz, la alegría interior, el amor como atracción a la unidad de la Realidad suprema, que es Una. Por tanto, el amor es algo absolutamente necesario. Si no hay división, no hay separación.. ¿cómo puede entonces haber diferencias, conflictos y luchas?. Lo único que puede permanecer es el amor. La comprensión por lo tanto, no es algo que está encerrado, no es algo que está limitado al mero plano intelectual, como así normalmente se cree. La comprensión inunda absolutamente todo. Comprender es ver desde la totalidad. Para ver desde la totalidad es necesario que seas, que lo que ahora crees que eres se disuelva y que esa identidad se amplíe hasta la totalidad. Esta es una extraña situación para nuestro pensamiento. La identidad tiene que expandirse infinitamente, y entonces ver desde esa totalidad, desde esa identidad expandida. Es como ponerse en los zapatos de otro.
Cuando la identidad está limitada, estamos creando complicaciones por todos los lados, separaciones, luchas, conflictos debido a esa misma limitación de lo que creemos ser. Y las luchas y los conflictos que generan los demás promueven una reacción mixta de la misma clase: la acción y reacción en cadena surge del mantenimiento de un estado limitado, de creernos que somos lo que aparece. Pero nosotros no somos las apariencias, tengámoslo claro, no somos lo aparente. Lo aparente no es nada, es una cosa ínfima. Podríamos decir que es una ilusión, una nada.. y diríamos la verdad: es una nada, la nada coloreada por la Conciencia. En el tiempo parece que esa nada tiene vida; pero el tiempo es una creación también de la mente, el pensamiento está ocasionando el tiempo, pero, digamos que el tiempo es un subproducto de éste instrumento pensante que es la mente. Sin pensamiento no hay tal tiempo, sin pensamiento desaparece la historia: la historia de la humanidad, la historia de un pueblo, la historia particular de una persona, etc. Cuando estamos más allá del pensamiento desaparecen todas las historias. Lo que Es no le sigue el juego a la memoria, porque la memoria es el recuerdo de lo que aparece, mientras que Lo que Es no requiere memoria porque, como está siempre ahí de instante en instante, es eterno. Lo que está en el tiempo requiere un aparato que lo grabe, que es la memoria, porque sinó, se está yendo todo el tiempo; y aún con la memoria se va, porque la memoria se va también, puesto que también es un aspecto temporal. Solo hay una cosa que mantener en nuestra mente, dejemos todo lo demás, solo hay una cosa que se tiene que mantener: lo Real está aquí y ahora, es eterno, está fuera del tiempo, y la comprensión brota del vivir desde ahí, no es de otra manera. Puedo pensar que, si no estoy en ese lugar, no tengo muchas expectativas en la vida, no tengo muchas esperanzas. Pero en realidad, sí tengo una gran esperanza; ir a ese lugar, Las demás esperanzas tienen sentido y es Él. 

No podemos valorar, que todos los proyectos y planes que vivimos no sean Inteligentes. Todo está dentro de una estación, está hecho de conciencia y es reflejo de la interacción; pero en cada plano, se añade el nivel correspondiente; el nivel físico se ocupa del fisico, y el mental de la identificación. Creemos que cada función trabaja, si nosotros nos identificamos con ello, pero eso es a riesgo de una media verdad. No todo se reduce precisamente en identificarse con ello, y todo funciona mal cuando tenemos esa angustia de creer que hay una serpiente debajo de cada piedra. Cuando vemos Lo que Es realmente, actuaremos de la manera adecuada a Lo que Es. En cada circunstancia una acción precisa. Cuando en una persona hay atención,  actúa de una manera destilada; actua de manera adecuada, y con una mayor sencillez. Porque siempre es más sencillo llevar por delante un palo que tener miedo de una serpiente, es mucho más sencillo. Entonces, ¿la vida se hace más sencilla?.. cierto.. seguramente se hace más sencilla, y sin duda se vuelve adecuada; es adecuada desde otro nivel, desde un nivel de comprensión. Por ejemplo: una persona que presta atención cumple con sus responsabilidades y llega donde ha prometido llegar, hace aquello que se ha comprometido a hacer, actúa sin distorsionar lo que los demás están haciendo, y no perjudica a los demás. Una persona que no esté atenta está en sus preocupaciones, está en sus enredos, en sus líos, no piensa en los demás, no se acuerda, se le pasa la hora a la que había quedado en una cita, se le olvida de hacer lo que había prometido hacer..etc.

La atención es una iluminación. 
Puede suceder que te distraigas de alguna cosa, pero básicamente la atención es una iluminación. Entonces, básicamente actúas de una manera adecuada. No exageremos y pensemos que los sabios nunca se olvidan del paraguas, porque sí, a veces, los sabios se olvidan mucho de los paraguas; no hay que exagerar en éste sentido. Pero, esencialmente, en lo que se ve como importante, en lo esencial, hay una adecuación de todos los niveles. Por ejemplo, en el cuidado del cuerpo físico. Se puede tener cuidado del cuerpo físico de una manera compulsiva, como tanto se ve en ésta sociedad: con angustia, amargándose la vida y amargándosela a los demás porque tienen que pasar análisis médicos todo el tiempo, por ejemplo. Esa es la forma de vivir cuando no se comprende lo que es la vida. Sin embargo, cuando hay comprensión no hay una despreocupación por el cuerpo físico, sinó una atención en darle lo que es necesario y proveerle de un cuidado razonable. Y si se ve, que en un momento dado hay peligro de enfermedad, se puede utilizar un producto que ayude, que sea natural, que no tenga efectos peores que los que resuelve. Pero la persona que está angustiada, va a por todas. Se puede tomar una droga terrible que le quite el resfriado, por ejemplo, pero que le deje una enfermedad secundaria de por vida, y luego seguirá con esa enfermedad, tomando más cosas que le compliquen otras, y así continúan..etc.

Lo que está pasando actualmente con la ciencia médica es muy significativo; es algo significativo que pasa en todos los ámbitos. En el ámbito de la pedagogía, por ejemplo, tampoco se les permite a los niños que espontáneamente brote de ellos lo que es natural, sinó que hay que educarlos de una manera determinada, hay que procurar que desde pequeños desarrollen la inteligencia porque luego hay una competencia enorme, se les enseña a manejar ordenadores a partir de los pocos años, y cosas por el estilo, para que luego no se queden atrás. Sin embargo, las teorías siempre se quedan atrás porque la vida es nueva en cada instante y siempre vienen cosas inesperadas. Pero las personas siguen preocupándose por aquella serpiente.

La actitud de la persona con sabiduría, la persona que comprende, es una actitud serenamente despierta. La persona es serena porque sabe que lo Real, lo verdadero, no es un peligro, ni un conflicto, ni una desaparición, ni una muerte, ni nada de eso. Lo Real está ahí, es eterno, es Un siempre, y esa certeza produce la única confianza verdadera. No es que produzca "una confianza", es la "única confianza" verdadera.

El intuir.. el contemplar o el unificarse con lo Real son las tres etapas que van produciendo la única confianza verdadera; las otras no son verdaderas: ni el confiar en la economía, ni el confiar en la costumbre, ni el confiar en las autoridades científicas. La única confianza verdadera, y la única libertad verdadera, es la que nace de lo Real. De esa comprensión y de esa serena lucidez brota la única y verdadera libertad. Las otras cosas son remedios, son caricaturas de la libertad; pero no es verdadera libertad, sinó lo que creemos que es libertad. Hacer lo que quieres en un momento dado, suele estar movido por corrientes, energías, impulsos, ideas que no vemos. Eso es hacer lo que quieres. Cuando todo eso se ha comprendido brota la verdadera libertad: la libertad de ser lo que realmente Es un instante eterno. Nada de lo que aparece es real. En éste sentido, ser libre es no estar limitado, no estar condicionado por nada.

Las personas creen que ejercen su libertad cuando siguen algunos condicionamientos, cuando obedecen, cuando siguen ciertos impulsos, ya sean biológicos o sociales; así entienden que están ejerciendo su libertad. Pero la libertad es no estar limitado por nada, no estar coaccionado por nada, no tener ningún condicionante, y no repetirlo. En otras palabras, ser nuevo en cada instante; la transmutación empírica, eso es ser libre. Que nada del pasado te esté empujando, que nada del pasado te esté impulsando a actuar y/a vivir, ni del pasado de hace siglos, etc. ni del pasado de lo que oíste ayer. Que nada del pasado te afecte, que vivas en éste instante presente y eterno sin tomar en cuenta lo que oyes alrededor del pasado, ajeno a lo que aparece, a lo que se mueve en el sueño; porque si empiezas a escuchar esas voces, serán como como cantos de sirenas, y fácilmente acabarás cayendo y embaucado. Tienes que estar bien sujeto al mástil de la instrucción, bien centrado en ese foco de luz que es tu verdadera naturaleza para que no te dejes llevar por esas voces ilusorias del pasado, siempre son del pasado. Porque lo eterno, no habla de esa manera espectacular, lo eterno no es así, no es un canto que entusiasma, o que hipnotiza. Lo eterno está siempre ahí, y es necesario aprender a escucharlo desde el silencio. Coloquemos nuestra identidad en otra habitación y lo in-divi-dual en un lugar distinto para poder escuchar aquello que es eterno, y que no pertenece al pasado.. ¿¿Estamos despiertos para vivir?? .. ¿¿Estamos lúcidos?? .. ¿¿Hay sabiduría en nuestra vida??.

Assalamo aleikum.