domingo, 4 de diciembre de 2016

EXISTENCIA Y FACULTADES II (Las formas)

Continuación ..

Los predicados ciertos de las formas espirituales particulares, son aquellos que se encuentran en las formas corporales, y por eso se perciben con los sentidos externos. Estas formas espirituales deben pasar (inevitablemente) por el sentido común. Para que haya certeza en algunas de ellas, basta con que pasen por uno solo de los sentidos para que sean ciertas. Incluso les tienen que ayudar (para ello) los demás sentidos y hasta necesitan de la facultad pensante y reflexiva.. Por ejemplo: Para decir que éste hombre está vivo, no basta con mirarlo o tocarlo, pues ciertamente puede que sólo se haya desvanecido ..Ni basta con verlo y tocarle, sin que intervenga la facultad reflexiva y para asegurarse de que éste hombre vive, (pues es posible que tenga obstruidas las venas, que no respire y que esté privado de todas las acciones propias, quedándose únicamente con aquellas operaciones (propias) de un ser vivo que podemos deducir con el tacto, las cuales, sin embargo, no producen certeza. Por eso habrá de solicitar la ayuda a la facultad reflexiva con otras cosas que captemos por los sentidos, como el pincharle para ver una gota de sangre, o ponerle un espejo junto a la boca para que se vea la humedad de su respiración, pues a veces ésta se oculta tanto que no la podemos captar por los sentidos.
El sentido (externo) produce en ocasiones certeza, como en el caso de las formas particulares.. Pero a veces, también la produce el silogismo, como cuando decimos: "éste muro esta construido, luego tiene un constructor".. Este silogismo únicamente nos proporciona la forma espiritual pensada de una cosa.. por eso, estas formas espirituales se conforman en el sentido común de una forma distinta a como lo eran o son las confirmaciones que perciben nuestros sentidos externos. Es la razón por la cual el sentido común es distinto en quien contempla el edificio en presencia de la imagen del constructor mismo. Y la causa de esta diferencia, estriba en que no se han unido las tres potencias que confeccionan las formas espirituales, tal y como estaban en su ser corporal. Por eso, cuando se juntan las tres potencias hacen su aparición las formas espirituales, como si se las sintiese (con los sentidos externos) porque con la reunión (de las tres potencias) se da necesariamente la verdad y se admira uno al ver éste hecho.
Creen los sufíes que es el fin último del hombre, por lo cual dicen en sus plegarias: "Que Allah te una a ti mismo".. y te conceda la reunión.. Y ello, porque no se pueden formar puras formas espirituales en el hombre, mientras esas formas espirituales desempeñan su función esencial. Estas últimas (formas) son falsas cuando están separadas y se dan cuenta de que son siempre verdaderas cuando se reúnen, por eso creen que la unión de dichas potencias constituyen la felicidad última (del hombre). Y puesto que en ese acto de reunión (de las facultades) se presentan (a quien experimenta tal reunión) en formas extrañas, sensacionales potenciales y terribles de aspecto y almas mucho más bellas que en la realidad, piensan en consecuencia, que la percepción de tales cosas es la meta (última a conseguir). Dijo Ghazzali..Que había percibido imágenes espirituales y que había contemplado substancias asimismo espirituales, insinuando la grandeza de lo que había presenciado con el dicho del poeta:"Sea cual sea,(lo que ocurrió,) yo no me acuerdo." El logro de la última felicidad no se consigue con el estudio, sino con la entrega total y sin que un sólo pestañear de los ojos esté sin el recuerdo de Allah SWT, porque cuando así se obra, se concentran las tres potencias y es posible (que se lleve a cabo) esto. Pero todo ello es materia opinable, pues tales acciones están fuera del Orden natural, además de que este fin que se plantea, aunque fuese verdadero, y constituyese el fin, su consecución sería accidentalmente y no por el modo esencial.. Más aún; Aunque se lograse, no se podría constituir como un fin completo y quedaría inoperante por completo la parte más noble del hombre, (cual es el intelecto) y su existencia sería inútil.. Además, según esto, toda enseñanza seria vana, así como las tres ciencias que constituyen la sabiduría racional fundamental.. y no sólo esto, sino también lo serían las artes objeto de opinión, la gramática y otras similares.
Estos modos producen (de modo esencial) la certeza de los predicados de las formas espirituales. A veces se producen también en los predicados accidentales, a través de las noticias y de la cadena de transmisión o sucesión de las mismas, sólo que entonces, únicamente se da esto mediante la conjunción de la potencia reflexiva con la facultad de la memoria. Por eso, cuando se une a ellos el sentido externo, no se presenta la forma de la cosa como es en realidad.. Por ejemplo: La existencia del caudal de un rio.. Esto a veces engendra certeza, pero no cuando la forma espiritual y la situación están sólo dentro del sentido común de quien lo ha visto tal y como es en realidad, porque entonces, el sentido común no se ha unido a las otras dos potencias.. En cambio, si ocurriera que se uniesen (las tres potencias) en un individuo, la forma espiritual, del sujeto y la posición a ella se convertirían en lo que son en realidad y ello daría testimonio de la forma espiritual, tal y como es en su ser real.

CONTINUARÀ en III parte.