jueves, 30 de julio de 2020

LA ACCIÓN DE ALLAH SOBRE LA VOLUNTAD HUMANA.

Cuando Allah concurre a nuestras acciones, ordinariamente no hace más que seguir las leyes que Él ha establecido, es decir, conserva y produce continuamente nuestro ser, de forma que los pensamientos nos suceden de forma espontánea y libremente en el orden que lleva consigo la noción de nuestra sustancia individual, en la cual podían preverse desde toda la eternidad. Además, en virtud del decreto que ha establecido para que la voluntad tienda siempre al bien aparente, expresado o imitando la voluntad de Allah, según ciertos aspectos particulares, con respecto a los cuales este bien aparente siempre tiene algo verdadero, que determina a la nuestra en la elección de lo que parece mejor, sin obligarla, sin embargo.. Hablando de un modo absoluto, está en la indiferencia en cuanto se la opone a la necesidad y tiene la facultad de poder obrar de otra manera y de suspender, incluso, radicalmente su acción, ya que uno y otro permanecen posibles. Dependen, pues, del alma el prevenirse contra las sorpresas de las apariencias por una firme voluntad de reflexión y no obrar ni juzgar en ciertas circunstancias, sino después de una detenida deliberación maduramente. Es verdad, que incluso desde la eternidad, que algún alma no se sirva de ésta facultad en tal circunstancia, pero ¿quien puede evitarlo? 

Muchas veces, antes de pecar el alma se queja del pecado.. Pero no es Allah el que determina el pecado.. ¿de donde está determinada a pecar sino después que peca efectivamente?.. Sólo se trata de no querer y Allah no puede proponer una condición más fácil y más justa.. Así todos los jueces, sin buscar razones, sólo se detienen a considerar en qué grado es mala ésta voluntad.. Esto es seguro para toda la eternidad.. Cuidaros de pecar pues los efectos son restrictivos en la luz.. Obrar según el deber que sí conocéis.. Y ya que el pecado es vuestro judas particular, al menos el arrepentimiento tiene que ser ejemplar.. Pues todo pecado es una usura en el universo. 
Allah sabe sacar de ello un bien mayor y que Él encontrará.. En toda ésta serie de cosas, en la que está comprendida la existencia del pecador y la responsabilidad, Allah hará lo más apropiado para perfeccionar económicamente la elección de algo que nosotros, mientras seamos viajeros en este mundo, Él procura la ayuda necesaria para que seamos felices y comprendamos.. Sabemos, pero hay que comprender la Unión y Altruismo de la Divinidad y Su Sabiduría sin buscar el detalle que envuelve las consideraciones divinas. 
Bien se puede ver, que Allah no es la causa del mal, pues no solo, después de la pérdida de la inocencia de los hombres, el pecado se apoderó del alma, sino que antes había también una limitación connatural a todas las criaturas que las hace pecables o capaces de hacer pecado. Así, no hay más dificultades por la intervención de Allah.. Ya que la raíz del problema está en la nada, es decir, en la limitación o privación de las criaturas y que Allah procura el remedio en Su Gracia por el grado de la perfección que le place dar. Esta Gracia de Allah, sea ordinaria o extraordinaria, tiene sus grados, es siempre eficaz en sí misma para producir el efecto proporcionado, y además, es siempre suficiente, no sólo para librarnos del pecado, sino también para producir la salvación.. Suponiendo que el hombre coopere a ella por su parte.. Pero siempre se requiere un esfuerzo por parte del hombre, ya por sus inclinaciones.. Pues de otra forma no tendería a nada.. Y ésto está reservado a la única Gracia eficaz que siempre sale victoriosa por la misma o por las congruencias de las circunstancias. 
Para comprender mejor los principios, precisa y formalmente, en plena extensión de los fenómenos naturales y particulares de las cosas, existe el fenómeno de las naturalezas indivisibles, como causa de las apariencias.. No debemos olvidar ni apartarnos demasiado de los seres inmateriales sin tener prejuicios de piedad.. Pues Allah obra por objeto de Su Voluntad.. Es ahí donde debemos buscar el principio de todas las existencias y de las leyes naturales, puesto que Allah siempre propone lo mejor y lo más perfecto.. Aunque a menudo estamos expuestos a errores y equivocación cuando intentamos determinar los designios y fines de Allah por querer limitarlos a algo en particular, creyendo que no tiene cuenta de las cosas.. Allah no hizo el mundo sólo para nosotros.. El alojamiento no puede acomodarse enteramente a nosotros, aunque Allah siempre nos tiene en más consideración.. Así, cuando veamos un efecto de alguna perfección que sucede, deberían pensar que eso sigue siendo obra de Allah y lo podemos decir con plena seguridad, pues Allah se la ha propuesto hacer y Allah nunca hace nada por azar.. No es como nosotros, que a veces se nos olvida hacer el bien. 
Reconocer la sabiduría del autor de las cosas y tener un elevado sentimiento de piedad.. Esa es la verdadera filosofía que debiéramos poner en práctica.. Pues muchas personas tienen ojos, sin que los utilicen para ver.
A estas alturas, no hay que explicar que Allah tiene influencia sobre todo y sobre los hombres y otras sustancias por un concurso extraordinario y milagroso.. Pero nada de ésto es circunstancial y está todo prefijado desde la naturaleza. Es preciso recordar lo dicho anteriormente sobre los milagros en el universo y que siempre están de acuerdo con la ley universal del orden general.. Aunque estén por encima de las máximas subalternas. 
Toda persona o sustancia es como un pequeño mundo que expresa el grande, lo mismo puede decirse, que ésta acción extraordinaria de Allah sobre esa sustancia no deja de ser milagrosa, aunque esté comprendida en el orden general del universo.. En cuanto es expresado por la esencia, nada le es sobrenatural, puesto que se extiende a todo.. TODO.. ya que un efecto expresa siempre su causa y Allah es la verdadera causa de las sustancias.

"Así hablaba el mendigo"                                    Sheykh Ahmad Salah As Sufi.