martes, 11 de enero de 2022

ALGUNOS OBSTÁCULOS A LA MEDITACIÓN.

ALGUNOS OBSTÁCULOS EN LA MEDITACIÓN.

Las primeras etapas de la meditación suelen ser las más duras porque la mente no está acostumbrada a controlar o detener los pensamientos. De hecho, combatirá la quietud con todos los medios a su alcance, de la misma manera que un caballo se resiste para ser domesticado. En éste punto, las estrategias del cuerpo y de la mente, para obstaculizar la meditación son: "Aún que bien te habrás entregado a tu Creador en éste camino interior, cuando todo el infierno se conjurará contra ti.. Es muy ordinaria la guerra en éste interior recogimiento".. Síntomas de ésta lucha interior son el deseo de acabar prontamente la oración, la molestia de los pensamientos, el cansancio corporal, el sueño inoportuno, etc., en definitiva, subterfugios del ego--mente que trata de evitar que accedas a la contemplación.

Pero "éste monstruo" se ha de vencer. Esta hiedra de negro veneno, cabeza del amor propio, se ha de despojar para llegar a la cumbre del alto monte de la paz. Para vencer estos obstáculos es necesario adoptar una serie de medidas como la de dedicar siempre un tiempo mínimo a la meditación con independencia del resultado. Si la mente sabe que hay un tiempo fijo de oración, ya no se afanará en acortarlo. Tampoco hay que abandonar la meditación si no se obtienen resultados en los primeros intentos; "Aunque no puedas salir del afán de los pensamientos, ni sientas luz, consuelo, ni espiritual sentimiento, no te aflijas, ni dejes el recogimiento.. Pensarás, por salir seco de la oración, de la misma manera que la comenzastes, que es por falta de preparación y que no le sacas fruto. Todo ésto son estrategias del ego que pretende acercarse como un comerciante en busca de beneficios y resultados. Pero los mercaderes no pueden vender en el Templo, (deben ser expulsados), para que esté totalmente vacío; Cuantas veces te ejercitarás en arrojar con suavidad estos vanos pensamientos, y otras tantas coronas que te pones en la cabeza; y aunque te parezca que no haces nada, desengañate, que la oración agrada mucho al Dador, y con un buen deseo en firmeza y estabilidad en la oración es lo mejor. En esos primeros momentos es imprescindible el esfuerzo y la dedicación para encontrar la postura, y actitud mental y psíquica adecuadas, pero es muy importante tener en cuenta que la quietud es contemplativa, no es de la meditación que es esencialmente una actividad inferior, por rigor, y no necesita de un mayor esfuerzo.  De hecho, la verdadera contemplación tampoco requiere de ningún esfuerzo; El propio esfuerzo se hace para resistir los pensamientos, sabiendo que es un impedimento y que dejarán a tu mente más inquieta.

En todo caso, algunos sabios señalan que, tan profuso es dar consejos como recibir la práctica de la contemplación, y no se puede revelar por escrito la técnica concreta para aquietar la mente, y lograr el silencio interior. A lo más, se ofrece el usual de la jaculatoria (como el dhikr) que habrá de ser empleado por espacio mínimo de tres años "repitiéndolo, tantas veces como se respira" a la vez que se dice "In Sha Allah" en la eternidad hasta conseguir la más perfecta pacificación y silencio interior. Si ésto fuera así, (cuestión sobre la que no tenemos juicio para pronunciarnos), que aquello que está mejor guardado es dado en discreción y no es cuestión de explicación por ninguno de los escribas.. ¿Cómo lo iba a hacer servidor?.

Assalamo aleikum. 

Shaykh Ahmad Salah As Sufi.